Aunque a primera vista parezca un gran fiasco que mis promesas, o deseos, de escribir a diario, sacar fotos y pasear, leer y hacer tantas cosas distintas, todas a diario, no hayan sido posibles y, por eso, parezcan que mi mes sea – porque aún no se ha acabado el mes – un fiasco de promesas. Tengo que decirles que no, un largo un rotundo NOOO. Mi mes esta siendo, y espero que los que vengan también lo sean, fenomenal. Hace mucho tiempo que no trabajo tanto, tengo tanto trabajo que ni con agenda soy capaz de encontrarme, claro está, si no estoy con la cabeza centrada en lo que tengo que hacer. De la noche a la mañana me vincule a cuatro empresas para las cuales presto servicio por toda Galicia y dale viaje y dale trabajo. Me encaaannnttttaaaaa!!!!
Me gustaría haber sacado fotos de mis viajes por Galícia, pero no fue posible, me centré tanto en este trabajo que no me fue posible parar y buscar sitios preciosos en cada una de las ciudades por las que pasé. Puedo decirles que nunca viajé tanto, en tres semanas hice más de tres mil kilómetros. Nadie comprende mi trabajo ni el placer que tengo por trabajar, en realidad eso no me importa. Estoy tan contenta que las cosas malas de la vida y las personas que no tienen afinidad conmigo, las dejé en algún canto perdido en la carretera.
Mismo con tanto trabajo y un mes para allá de corrido, aún he tenido tiempo para leer y voy a dejarles las reseñas de mis libros. Los libros de este mes son especiales, una coincidencia de la vida coger libros tan distintos y a la vez similares en la biblioteca. Fue al acaso, si es que el acaso existe…
Espero que el mes de agosto tenga sido agradable – o mejor, esté siendo – y que tengáis aprovechado cada minuto del verano, de las vacaciones o del trabajo. Les puedo garantizar, que sí yo he aprovechado y sigo haciéndolo. Les dejo una foto de la playa que estuve ayer, una de las muy pocas fotos que he podido sacar este mes.

Besitos a todos.